¿Qué es el autoconsumo?
El autoconsumo es la generación de energía eléctrica mediante módulos solares fotovoltaicos para el consumo propio de electricidad. Los sistemas de autoconsumo eléctrico permiten a las empresas contribuir a la transición energética y a la lucha contra el cambio climático, al tiempo que ahorran en la factura eléctrica.
Con el autoconsumo de energía el consumidor se sitúa en el centro, ya que dispone de capacidad de decisión sobre la producción y consumo energético que realiza. El sistema utilizado para producir, almacenar y utilizar esta energía se llama sistema de autoconsumo.
Existen dos tipos de sistemas de autoconsumo: conectados a la red o aislados:
AUTOCONSUMO CON EXCEDENTES, CONECTADOS A LA RED
Las instalaciones de autoconsumo de energía solar conectadas a la red eléctrica son las que permiten vertir la electricidad sobrante (no consumida) a la red de distribución y consumir energía de la misma cuando no existe la suficiente producción propia de energía fotovoltaica.
El autoconsumo con excedentes se subdivide en dos categorías:
Fotovoltáica de Autoconsumo Con Excedentes y Compensación: El consumidor utiliza la energía procedente de la instalación de autoconsumo cuando la necesita, pudiendo consumir la energía de la red en los momentos en los que la energía solar generada no sea suficiente. Cuando no se consume la totalidad de la energía procedente de la instalación de autoconsumo, esta puede inyectarse a la red y, en cada periodo de facturación, la comercializadora compensará el coste de la energía comprada a la red con la energía excedentaria, valorada al precio medio del mercado horario o al precio acordado con la comercializadora. Para acogerse a esta modalidad, hay que cumplir los siguientes requisitos:
La fuente de energía debe de ser renovable.
La potencia instalada no sea superior a 100 Kw.
Un único contrato para el consumo asociado y los auxiliares con una comercializadora.
Existencia de un contrato de compensación de excedentes de autoconsumo.
No estar sujeto a otro régimen retributivo adicional (Descuentos no acumulables).
Fotovoltáica de Autoconsumo Con Excedentes y SIN Compensación: Pertenecerán es ete grupo aquellas instalaciones de autoconsumo con excedentes que o bien no cumplan los requisitos para acogerse a la compensación, o bien, voluntariamente decidan no acogerse a ella. En este caso, los excedentes se venderán en el mercado eléctrico.
AUTOCONSUMO AISLADO, SIN EXCEDENTES
En las instalaciones de autoconsumo aislado no existe conexión a la red eléctrica, por lo que no es posible volcar o consumir electricidad de la red general. En este tipo de sistemas, el consumo de electricidad es instantáneo y el excedente se almacena en baterías para usos posteriores.
El autoconsumo aislado permite la autosuficiencia energética a través de sistemas de almacenamiento con baterías.
Ventajas del autoconsumo
Una instalación de autoconsumo es muy ventajosa para su propietario:
Empieza a ser rentable desde el primer instante de uso. En cuanto empiezan a funcionar los módulos solares tu consumo de electricidad se reduce drásticamente, con lo que pagarás menos en tu factura de la luz desde el primer día.
El coste de la energía es cada vez más reducido. Cada día que pasa es más barato instalar paneles solares fotovoltaicos en el hogar y en la empresa.
Aumenta el valor de tu propiedad al disponer de una instalación de autoconsumo fotovoltaico, tanto para hogares como para empresas.
Mejora la competitividad en el caso de las empresas, al reducir considerablemente los costes de producción al tener que pagar mucha menos electricidad.
Es una energía limpia. No genera emisiones de CO2 a la atmósfera, culpables del calentamiento global.
Legalización de Instalación Fotovoltáica de Autoconsumo.
RDL 15/2018, RD 200/2015, RD 1955/2000, RD1699/2011, RD 244/2019.
Éstos RD son los que regulan los procedimientos y condiciones de las instalaciones de autoconsumo fotovoltáico conectadas a la red. Esta regulado y legislado por el RDL 15/2018, así como el RD 244/2019.
Tras la entrada en vigor del Real Decreto Ley 15/2018, simplifica de manera enorme las instalaciones fotovoltaicas para consumo propio, ya que evita un sinfin de farragosos trámites administrativos.
Únicamente es necesario su correspondiente legalización en la Consejería de Industria, según la potencia que deseemos legalizar.